Después de leer el artículo publicado en el Mundo Orbyt y ya que, afortunadamente, estoy de "semi-vacaciones", puedo dar mi opinión sobre este asunto, sobre la base de los tweets intercambiados con el profesor M.A. del Val, y puntualizar un par de cosas:
Sobre la reforma de la educación que el ministro Wert plantea, se debate en este artículo uno de los que, a mi juicio, no es de los puntos fundamentales de la ley, pero quizá es el que ha levantado más controversia.
a) Decir que los "pobres" han de esforzarse más es algo totalmente cierto. Es igual de cierto decir que una beca que apenas cubre la matrícula universitaria no hace más que aliviar una parte de los esfuerzos que debe hacer la familia que tiene a su hijo estudiando en la universidad. Los 1500-3000 euros de la matrícula son una cuantía nada desdeñable, pero no exime de pagar por el transporte, material, y tiempo que el estudiante dedica en la carrera (Coste de oportunidad que lo llaman en economía).
A pesar de la beca, el estudiante tiene en muchos casos que trabajar a tiempo parcial, y la familia "apretarse el cinturón" (que de moda está ahora) para poder permitirse la educación. A mi manera de ver, es un esfuerzo considerable, y no está de más contribuir con la exención de tasas.
b) El otro tema sería donde establecer el listón para considerar a un alumno apto para recibir una beca y un alumno no apto para recibirla. Y al hilo de esto, escuché una razonamiento hace poco que me hizo pensar:
"Es decir, que un 5 sirve para que una persona pueda ejercer de médico, pero no para que una persona con pocos recursos pueda acceder a ser médico"
¿No sería más lógico, en vez de decir que un alumno de 5 no puede recibir una beca por no ser suficientemente bueno, elevar el listón para que los alumnos que obtengan un aprobado sean suficientemente buenos? Eso sería lo que, a mi modo de ver, elevaría la calidad de la enseñanza sin atentar contra los principios de justicia e igualdad.
c) Otro tema sería, al margen de estas becas de "igualdad social", que permitan a los alumnos con menos posibilidades optar a tener una formación universitaria, las becas de excelencia. Esto no serían becas en sí mismas, si no que se trataría de un premio al rendimiento, fruto de un trabajo y una capacidad que deban ser reconocidos. Ahí, el listón no estaría en el 5 lógicamente, ni en el 6, 6'5... Pero no deberían mezclarse ambos sistemas.
Finalmente, decir que, lógicamente, esta exposición anterior sólo es válida para la educación universitaria.
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